Por: Germán G. Carías Bermúdez
Muere el reconocido Comunicador Social quien se desempeño como docente y ejecutivo de Pequiven en sus últimos años, debido a un accidente automovilístico provocado por un infarto en la carretera Lara-Zulia. Lo conocí cuando laboramos juntos en el Diario Correo de Los Andes en la ciudad de Mérida, era una persona de una alegría contagiante que siempre sabía como animarte en las horas más apremiantes. Recuerdo en esa época practicar el deporte de las artes marciales denominado Tae Kwon Do y teníamos largas charlas porque él era un practicante consumado de la disciplina del Karate. Su carisma natural lo llevó a realizar televisión en un canal local y recuerdo siempre jugarme con él, por el uso del panque (maquillaje de base) que utilizaba para presentarse frente a las cámaras.
En la lejanía de este exilio obligado donde siempre tuve el deseo de reunirme con mis amigos de siempre, me llegó la noticia de tú deceso causándome un gran dolor por saber que no podré compartir más contigo. Morir tan joven a los 47 años siempre causa mayor impresión en los familiares que no lo pueden aceptar, por parecer increíble el hecho de no verte más. Siempre mantuvimos el contacto y hable contigo por teléfono mientras estuviste reunido con Papá en tú natal Maracaibo el año pasado. En mi corazón y mi alma estarás siempre a mi lado porque te apreciaba, espero reencontrarnos cuando me toque mi partida. Paz a tus restos.
