Wednesday, October 13, 2010
Regreso a la Vida, Chile ejemplo a seguir
Los socorristas chilenos rescataron hoy a todos los mineros sepultados hace 70 días en las profundidades del desierto de Atacama, en una operación presenciada en vivo por millones de personas en el mundo.
El momento más emotivo fue vivido cuando salió el último de los 33 trabajadores atrapados, el jefe de turno Luis Urzúa, quien mantuvo unidos y disciplinados a sus hombres, 700 metros bajo tierra.
"Espero que esto nunca más vuelva a ocurrir. Gracias a todo Chile", dijo el topógrafo envuelto en una bandera chilena y ovacionado en presencia del presidente Sebastián Piñera y un lloroso jefe de los rescatistas, Andre Sougarret.
El rescate, que costó millones de dólares, desató la euforia en la bocamina y la aledaña Copiapó, donde hubo bailes, niños disfrazados de payasos y besos por doquier.
"Volvieron a la vida", resumió Ruth Guzmán, al recibir a su esposo Samuel Ávalos, padre de sus cuatro hijos, David (23) Jonathan (18), Carolina (9) y Eduardo (2).
Los trabajadores, entre los que había viudos con seis hijos, abrazaron a sus familias y rezaron arrodillados a Dios por un salvamento imposible hace semanas, cuando todos los creían muertos.
El rescate inicial del capataz Florencio Avalos, recibido en llantos por su hijo Bairón de siete años, desató las esperanza al inicio de la jornada que duró casi 23 horas.
"Estuve con Dios y el diablo", reveló Mario Sepúlveda, al narrar lo vivido por estos hombres que estuvieron 17 días comiendo dos trozos de atún cada 48 horas, antes de ser ubicados el 22 de agosto.
"Gracias, Señor. Estoy muy agradecido", dijo el boliviano Carlos Mamani, arrodillado. "Yo cambié, soy un hombre distinto", agregó Mario Gómez, de 59 años, quien trabajó desde los 12 como minero.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, informó que los mineros rescatados presentan un estado "satisfactorio", aunque cuatro deberán someterse a cirugías dentales y otro tiene neumonía aguda.
Cada ascenso, en una operación que comenzó la noche del martes, acabó con vítores de los 16 rescatistas escogidos para salvarlos, que hora tras hora llevaron a los mineros al hospital de Copiapó.
"Los buscamos como a nuestros hijos. Los encontramos con la ayuda de Dios. Los estamos rescatando como chilenos. Que su ejemplo nos inspire", dijo el presidente Sebastián Piñera por la red social Twitter de Internet.
El mandatario, en una trasmisión continua del gobierno por televisión, Internet y telefonía celular, bendijo a los rescatistas, abrazó a los mineros y agradeció los llamados de sus pares.
El papa Benedicto XVI, el dueño de la revista "Playboy", Hugh Hefner, el primer ministro británico, David Cameron, y el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, enviaron sus parabienes a Piñera y los mineros.
El mandatario estadounidense Barack Obama vio el hecho en vivo y dijo rezar por los mineros. Su par boliviano, Evo Morales, optó por viajar al mineral, para buscar a su compatriota Carlos Mamani, ileso.
"Para el pueblo boliviano será inolvidable el esfuerzo del presidente Piñera. Muchas gracias por el rescate de nuestro hermano", sostuvo el mandatario boliviano, junto a la familia Mamani.
Desde Argentina y por Twitter, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner alabó a Piñera, como hicieron también Hugo Chávez de Venezuela y Juan Manuel Santos, de Colombia.
"Acabo de hablar con Sebastián Piñera. Enorme emoción. Le dije: Sos parecido a Mario Sepúlveda, el segundo minero rescatado. Lo vi en directo. Sepúlveda arengaba desde el túnel. Después, imparable", twitteó.
Los hechos, que coparon las páginas de los sitios web, finalmente desbordaron esa porción del desierto de Atacama donde hasta antes de la tragedia no había acceso a Internet ni telefonía móvil.
"Esto es más que una historia, es un evento de la comunidad global", dijo la profesora de periodismo de la Universidad de Hong Kong, Yuen Ying Chan, a la cadena CNN.
"La gente está fascinada porque no es sólo una historia con gran interés humano, sino que involucra a un gran número de personas, tiene mucho suspense, trata de la vida y de la muerte", explicó.
De hecho, unos 300 medios extranjeros, la mitad de ellos televisoras, están en el yacimiento, según registros oficiales.
La mediatización del hito, el mayor rescate minero de la historia, copó todo. Incluso los propios mineros observaron por televisión su salvamento y emitieron imágenes desde la mina.
Pero los mineros, sus familias y quienes han vivido crisis similares pidieron frenar la exposición.
Daniel Fernández, un uruguayo sobreviviente de la tragedia de los Andes en 1972, dijo hoy a dpa en Montevideo que la contención que tengan los mineros será fundamental, para su felicidad futura.
El minero Mario Sepúlveda pidió que lo vieran como un trabajador y no un artista, después de su rescate.
Con la libertad en sus manos, varios trabajadores comenzaron a tejer sus nuevas vidas. "Serán felices", dijo a dpa el psicólogo que los apoyó en el encierro, Alberto Iturra.
Esteban Rojas, Jimmy Sánchez y Claudio Yánez, prometieron un pronto matrimonio a sus parejas. Otros esperan salir de vacaciones o recibir los festejos de sus vecinos en las fiestas que los esperan.
Pero un hecho de tanta envergadura global, también remeció la política chilena, donde el presidente Piñera, asoma hoy con un liderazgo que no detentaba hasta hace sólo semanas.